DESENLACE O ÚLTIMO CAPÍTULO, EN LA VIDA DE CADA CUAL
¿Cómo
hacerlo más llevadero, cuando pasamos de las seis décadas?
Digo lo de hacerlo llevadero, si bien, no es descartable, que descubramos pautas de comportamiento, a veces inimaginables, que
nos hagan aceptarlo con serenidad.
Creo!. Que si bien es complicado generalizar, es cierto, que un buen porcentaje, sufrimos de una manera u otra, la merma,
no sólo de facultades físicas, sino, lo que es peor, de la memoria.
Esto nos llega, cuando los hijos, con o sin disimulo nos perciben como anticuados o fuera de
tiempo.
Cuando esto ocurre, a lo máximo que podemos aspirar es, a que le vaya bien a la familia y que nos dejen disfrutar de
los nietos, ¡Ojo lo justo!. Porque a veces, nos los
endosan, pensando que podemos correr tras ellos hasta alcanzarlos, cuestión poco probable.
¿Qué podemos hacer, para enfrentarnos al lento
o rápido desenlace, al que todos sin excepción nos vemos abocados?
Lo más importante: Cuidar de los amigos, como nuestro mejor tesoro.
Huir de de cualquier arrogancia, que nos avoque a estar solos.
Saber! Que estar solo, es estar a merced de nuestros fantasmas.
RESUMIENDO:
Hemos
de activar los encuentros, con amigos y conocidos, mientras las facultades físicas y mentales, nos lo permitan.
