la fuente en 2.014
La
fuente se nos muere:
Con un silencio vergonzante, los isseros entre quienes me cuento, asistimos impasibles a la desaparición de un manantial, origen de nuestro pueblo y el mas relevante en cuanto a recuerdos y vivencias.
Si dijese que estoy sorprendido por cómo contemplamos impasibles el exterminio de su fauna, mentiría, pues mi pueblo es así,y quienes nos gobiernan desde Hellin ni te cuento.
Con un silencio vergonzante, los isseros entre quienes me cuento, asistimos impasibles a la desaparición de un manantial, origen de nuestro pueblo y el mas relevante en cuanto a recuerdos y vivencias.
Si dijese que estoy sorprendido por cómo contemplamos impasibles el exterminio de su fauna, mentiría, pues mi pueblo es así,y quienes nos gobiernan desde Hellin ni te cuento.
Ocurre, que somos gentes, que entre hablar del manantial que muere, o hacerlo sobre la
celebración de cualquier evento o chisme, nos quedamos con lo segundo.
Por
tanto, si como pueblo pensamos así, hemos de aceptarlo, y esperar que
generaciones venideras cambien esa mentalidad de que "Nada se puede hacer".
Lo
que más me entristece de esta situación es, que nuestros jóvenes les está tocando vivir un tiempo complicado, en
cuanto a la posibilidad de ser el motor de estas inquietudes, pues bastante
tienen con encontrar un futuro para ellos.