Arañándote las entrañas:
Apesar
de los años y la experiencia, quedas descolocado y atormentado.
Es
como un miedo
atroz a que se derrumbe el frágil castillo, que en nuestro delirio mas
irracional, somos capaces de levantar.
El cerebro toma las riendas y me hunde, dejándome alejado de la racionalidad más elemental.
Afortunadamente no han
sido muy frecuente, pero si bastante virulentos.
Sientes que el estómago se retuerce y deja de
funcionar, entrando en una especie de círculo alocado, incapaz de salir a corto
plazo.
Puede
que estos comportamientos sean habituales en una buena parte de los mortales.
¿ Asaber?
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