PASADO

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LA SOBERBIA TIENE UNA HIJA Y ES LA INGRATITUD, (EL QUIJOTE)

miércoles, 9 de noviembre de 2022

TORMENTAS EN TIEMPOS DIFÍCILES / AGOSTO

Descripción que recuerdo de las tormentas, en los años 60:





 Difiere bastante, de cómo se producen hoy día. ¡¡Me explico!  El amanecer típico de un día de tormenta arrancaba con la cabañuela, traducida en cierta humedad, niebla y nubes bajas, que a media mañana comenzaban a disiparse, dando paso a nubes de evolución vertical, que crecían al oeste en zona montañosa y por lo general entre el "Pico" y " la casa Pegote" .
Estos cumulonimbos emergían oscuros y con bordes muy definidos y redondeados.  Sobre medida mañana se diluían las nieblas bajas, quedando formada la amenaza de tormenta para la tarde.

 Sobre el medio día, se producía el ocultamiento del sol, y en el tiempo de la siesta se oían lejanos los primeros truenos, con cierta lentitud la luz del día, iba dando paso a cierta oscuridad, según el desarrollo de la tempestad.

Entre la 5 y las 6 de la tarde, los mayores comenzaban a visitar la esquina de Tartaja, que era el mejor lugar para seguir la evolución de la tormenta.
 Aún recuerdo comentarios como, "esta cogida en el porrón", "toma fuerza en el estrecho", "aquellos ramales son de granizo", "le están tirando en el pozo cano", "se ha partido en el pico", "se vence a payuelas", "los cohetes la están volviendo".. et. et.
Mientras tanto, las familias se afanaban en guardar, todo lo que se pudiera perjudicar, en mi caso, recoger las cabras, la mula y tapar las ollas, las mujeres recogían ropas, las gallinas, y algún que otro animal de corral.
Los habituales de vigilar y comentar el desplazamiento, y la embargadura de la tormenta eran, el Cosme Pizlan, Juárez .el Porras, el Cojo Toni , Alfredo, Manuel el Pajarero (mi padre) que por cierto solía llegar de los últimos y también  era de los últimos en resguardarse y cuando ya caían las primeras gotas o  granizos, a veces también se añadían Luis Leona, José Perol, Hermogenes y otros que no recuerdo, al tiempo que seguían los movimientos de la nube, se contaban historias de tormentas pasadas.
 En animada conversación, se analizaba minuciosamente todos los movimientos de la tempestad.
 En las conversaciones y comentarios solía aparecer, el desgraciado suceso que se produjo en el barrio Graos, donde un rayo alcanzó a un bebé, en brazos de su madre, falleciendo en el acto.
 La señora era la "Señorita", porque si no recuerdo mal, era la amante de uno de los que antes llamaban el señorito, o algo así.
Si la tormenta llegaba al barrio, las familias con todo recogido entraban en sus casas, se cerraba las puerta, y se retiraba el puente que hacia de plomo, en la acometida de la luz, despues en penumbra  conteníamos el aliento. 

  Cuando el viento y las primeras gotas anunciaban que la tempestad era inminente, un silencio angustioso atenazaba a toda la familia.
  Si el granizo hacia acto de presencia, el miedo se convertía en angustia, era sabido que el sustento del año estaba en peligro, si solo era lluvia los rostros se relajaban y se daban gracias a dios.
Hay algo que deseo reseñar por lo estrambótico, el grito de guerra de Pizlan, un vecino que cuando la tormenta descargaba con la máxima intensidad, salía a la puerta de su casa y lanzaba un potente grito a lo Tarzan, que por cierto nunca llegué a entender.

También recuerdo, que después de la tormenta, los más jóvenes nos dedicábamos cazar pájaros caídos de los nidos, que en sus primeros vuelos y con los árboles mojados era fácil de capturarlos.
 El resultado era volver a casa
embarrados, afortunadamente las casas de aquella época estaban preparadas para este tipo de cosas, los suelos solían ser de tierra, o material similar, en definitiva, las preocupaciones no pasaban por tener las viviendas como los chorros del oro, entre otras cosas, porque en muchos casos eran casas con habitáculos adosados como cuadras, gorrineras, gallineros et. 









                                                                       

DIÁLOGOS CONMIGO..( 1.918 )


Próximo a cumplir 68 años, y aun navego con viento favorable,

no me sobra nada, pero disfruto de una aceptable calidad de vida.
Mi familia más directa por ahora, con salud y ocupados.
En estos últimos años y debido a la jubilación he sumado conocidos, con los que comparto actividades diversas de ocio, entre otras, piscina, almuerzos, universidad et.
  Los escarceos en el blog y redes sociales también contribuyen a mantenerme entretenido.
 Por otra parte, la suma de amigos o conocidos, con quienes comparto cierta proximidad, no pocas veces y debido a la generación de confianza, suelen vaciarme el tarro de sus verborreas políticas, no exentas de insultos de todo tipo, sobre aquellos que no piensan como ellos, esa actitud irrespetuosa y crispada de manifestarse, en no pocas veces me dejan descolocado y frustrado, hasta el punto de guardar mis argumentos de respuesta, y de la mejor manera posible, incluso haciendo humor, procuro desviar ese tipo de conversaciones. 
 










martes, 8 de noviembre de 2022

NUESTRAS GENTES- ( JOSE LOPEZ) /





LOS ESCEPCIONALES DE ISSO:


Creo que cada pueblo tiene personas, que, por su peculiar manera de ser, adquieren cierta popularidad entre sus gentes.
José López, "Yerno del Carpintero" es una de ellas.

Camionero de oficio, en la actualidad presidente del Isso. C. de Futbol.
 Es un gran catálogo, o libro de instrucciones, de cómo vivir transmitiendo desenfado, humildad, respeto y tolerancia.


 Uno de los más destacados y que no quiero omitir, el de participar, en todo aquello que pueda ser más o menos relevante para su pueblo, he de decir que no se si nació en Isso, lo que si se, que es Issero como el que más.

He tenido bastantes ocasiones de oírle, desde cantando la canción del Pernales pidiendo el aguilando, haciendo reír a los peques en carnavales, con nuestro patrono Santiago a hombros et.et...
En sus monólogos es un auténtico sahúman, hilvana sus historias con humor.
De este peculiar personaje, yo destacaría en sus charlas, que nunca habla mal de nadie, salvo de los politicos.
   El principal personaje de sus historias es el mismo, disertando sobre sus vivencias en la ruta, como camionero autónomo, y a fe, que tiene un gran repertorio.
Tuve la oportunidad no hace mucho, de escucharle contar una de tantas, pero que dice mucho y bueno de este José.
Se trata de su llegada con el camión un lunes, a cargar coches a la Ford en Almussafes.
 Es sabido, que los lunes como primer día de la semana laboral, es ya de por si poco alentador, si además le añades la crisis general que el país en su conjunto está atravesando, el resultado que el transporte de coches se está viendo muy afectado, al parecer, y según me comenta, cuando llego a la cola de carga, había muchos compañeros bastante cabreados por la larga espera que estaban soportando, y cada uno comentando las dificultades para llegar a fin de mes, en definitiva había un cabreo general.


Pensó este nuestro José, que aquel ambiente de pesimismo había que revertirlo de alguna manera, pues quedaban muchos días de la semana, y nada peor que iniciarla de esa forma, al momento se le ocurrió decirles a algunos de los que conocía que les invitaba a café, porque él estaba contento, ya que el día anterior le había tocado un pequeño premio en la lotería, y deseaba compartir su alegría con ellos,( No era cierto), pero al momento estaban charlando con humor, a la espera de que les fuesen llamando para cargar.

Creo que necesitamos de este tipo de personas, para hacer de nuestra vida, y la de quienes nos rodean, menos crispada y en definitiva más optimistas.