Miércoles 4 de Enero de 1.984:
Un día de mi vida en Isso:
Estoy de vacaciones, me levanto pasadas las 10 de la mañana, hasta la hora de comer haciendo arreglos en casa.
Durante la comida nos comentan, que en los pisos que hace Charame, (En esquina norte, donde se une la carretera de Elche, con el camino del cementerio) , ha habido un accidente mortal, él vigilante supervisor de obra ha caído desde el tercer piso, al colarse por el hueco destinado a la escalera.
Estoy de vacaciones, me levanto pasadas las 10 de la mañana, hasta la hora de comer haciendo arreglos en casa.
Durante la comida nos comentan, que en los pisos que hace Charame, (En esquina norte, donde se une la carretera de Elche, con el camino del cementerio) , ha habido un accidente mortal, él vigilante supervisor de obra ha caído desde el tercer piso, al colarse por el hueco destinado a la escalera.
Después de comer, me dedico a hacer el plano de la cañada, junto al barrio Castor.
Estamos Loli y yo, en casa de Pascual, tomando café.
Bajo a Bolos, casa de mis suegros.
Ceno en casa de mis padres.
Hoy regresan mi hermano Manolo y señora del P. Sagunto.
A última hora visitamos a Pepín y Lola,
Estamos Loli y yo, en casa de Pascual, tomando café.
Bajo a Bolos, casa de mis suegros.
Ceno en casa de mis padres.
Hoy regresan mi hermano Manolo y señora del P. Sagunto.
A última hora visitamos a Pepín y Lola,
Hoy sube el Gasóleo agrícola
El dólar continúa imparable.
El Líbano continúa siendo un polvorín.
Pesimismo por el futuro del mundo.
Estas instantáneas que aparecen en mis agendas, sirven en mi caso, para situarme sobre un buen espacio de mi tiempo, y comprobar que no debemos demonizar el presente, pues en las últimas reseñas del día, el pasado nunca fue un camino de rosas.
Es cierto, que los males pasados, poco pueden importar, especialmente a aquellos que en estos momentos lo están pasando mal, el pasado y el futuro son espacios irreales, de ahí, que estas referencias o apuntes sobre mi percepción de cómo debió ser, queda para la imaginación de cada cual.