Escribir y encontrar en la mente resquicios, sobre la gestión de mis emociones, es un reto con el que algunas veces no salgo bien parado
Especialmente para aquellos que como yo, intentamos dibujar lo que acontece en nosotros o en nuestro entorno.
Supongo, que a medida que acumulamos años, se producen cambios en nuestro cerebro, es como si la realidad perdiese luz y quedasen más próximos el día y la noche.
¡Por cierto!, esta noche pasada, he tenido uno de
esos sueños que te hacen reflexionar, sobre los odios y los miedos.
.
.
Estoy en una de esas chozas que se construían en los lugares donde se criaban hortalizas, eran de cañas, bien para envasar tomates, resguardarse de tormentas et.
Yo me encontraba dentro, cuando llegaron tres hombres huyendo y con apariencia miliciana, entraron dentro y quedaron alineados con la espalda pegada a uno de los laterales, ocupando la parte izquierda, según la entrada, me hicieron una seña para que callase y se acurrucaron, al momento se oyeron voces desde el exterior y varios hombres con pistolas empuñadas ocuparon la entrada de la choza.
Lo que aconteció a continuación, me pareció muy extraño, uno de ellos saca un puñal y con palabras de disculpa comenzó a apuñalarles.
Yo me encontraba dentro, cuando llegaron tres hombres huyendo y con apariencia miliciana, entraron dentro y quedaron alineados con la espalda pegada a uno de los laterales, ocupando la parte izquierda, según la entrada, me hicieron una seña para que callase y se acurrucaron, al momento se oyeron voces desde el exterior y varios hombres con pistolas empuñadas ocuparon la entrada de la choza.
Lo que aconteció a continuación, me pareció muy extraño, uno de ellos saca un puñal y con palabras de disculpa comenzó a apuñalarles.
Ha
sido un sueño muy desagradable y durante bastante tiempo me ha hecho pensar en
esa cantidad de conflictos existentes en el mundo, donde una persona o muchas, pueden ser exterminadas, en nombre de cualquier creencia, ideología o
simplemente por poder.