La cronología de este año es aproximadamente como sigue:
2 - Ocupamos
aproximadamente a finales de enero una habitación con derecho a cocina en casa
de la seña Lola en Mogente
3 - Nuevo embarazo en marzo
4 -
La señora regresa a Isso en un viaje épico el 14-8
5 -
Hasta navidad permanece en el pueblo
6 - Nacimiento
de Carlos el 8.-12
7 - Yo continuo detrás del equipo, esta vez,
hasta Játiva, donde acabó el año.8 - Franco
muere el 20-11
9 - Fuerte
tormenta en Bellus
1 - Momentos muy complicados, especialmente
para mi señora ante su primera experiencia como embarazada.
El mal logrado primer estado de gestación fue un duro revés para nosotros, pero especialmente para ella, que comenzó a vislumbrar la posibilidad, de que tal vez, se
debiera a alguna situación de anomalía en su naturaleza, por tanto, mi papel fue el de ocultar mi decepción, y a la vez, tratar de que recuperara su autoestima, tratando de animarla. De todas formas, no era fácil quitar de su
cabeza, la idea de fracaso que tenía.
Cuando todo esto ocurría a
primeros de enero, el equipo de sondeos al que tenía que incorporarme estaba
ubicado en Mogente.
Decidió acompañarme, y ese fue el primer
traslado para ella y fue a una casa, en la que nos alquilaron una habitación con derecho a cocina.La dueña era conocida en el
pueblo por “La señora Lola “.
La casa era de dos plantas. Una de esas viviendas antiguas, pero robusta,
y con fachada e interiores, de dueños acomodados en su tiempo.
El tipo de materiales empleados en su construcción, el reparto de espacios, las dimensiones de sus muros, la altura de los forjados, así como ventanales y puertas de gruesas maderas y con ciertos adornos daban a entender mi anterior percepción.
En cuanto a los ocupantes ,una señora viuda mayor, y un hijo de unos 35 o 40 años, él trabajaba en sus tierras y mi descripción podría ser, la de alguien, que por cualquier causa se había quedado a medio camino de integrarse en el medio que le había tocado vivir, estaba soltero y según supimos después, nunca se le había visto con mujeres, creo que sus días los habrá acabado solo, pocas veces saludaba, con nosotros era respetuoso, pero huidizo, en la relación con su madre se mostraba educado y escaso de conversación. entraba y salía de casa con un furgón Citroën “Dos caballos” , aun gran porche a la entrada que le servía de de cochera..
Recuerdo que su madre según nos decía le había mandado una solicitud para ser empleado de la Ford en Almussafes, que por entonces se estaba instalando en Valencia.
De su madre corrían bastantes historias, y que daban a entender el poco aprecio de que gozaba en el pueblo.
Mogente/ Pincho amarillo donde vivimos |
Su viudez era por partida doble, y aparte
del hijo que he descrito anteriormente y que era de su primer marido, también tenía
otra hija de su segundo marido, y que según decía la propia hija, su madre había
sido protagonista activa en su futuro, al parecer trató por todos los medio de
elegirle el marido, cuestión a la que ella no accedió, creándose ciertos
conflictos de convivencia entre ellas, en su momento.
Esta señora, de unos 60 años ,caminaba con una muleta debido a un problema de rodilla, y por el cual
Perforadora a rotación / Filing-2.500 / En este tipo de maquina trabajaba en Mogente |
ya arrastraba alguna intervención quirúrgica, en cualquier caso, se percibía en ella cierto orgullo y autoridad pocas veces doblegada.
Con nosotros fue respetuosa y educada, quizá
para ella, nosotros además de lo que le pudo suponer en su economía, tal vez
también fuimos un soplo de aire fresco en su vida.
Nuestra ubicación en la casa era justo en la entrada, la primera habitación que había a la derecha y allí en unos pocos metros cuadrados fue, donde iniciamos nuestra primera experiencia de casados, aquellos meses vivimos una de las etapas más ilusionantes de nuestra vida.
En marzo, de nuevo la Loli queda
embarazada, y los meses van pasando, por cierto, cada semana regresábamos a Isso,
donde podíamos estar con los nuestros, era fantástico como me sentía cuando
regresaba y volvía al trabajo acompañado de quien más quería, y ella por su
parte, radiante de felicidad con su nuevo embarazo, y dedicada a preparar las
meriendas de su marido, que por cierto en alguna ocasión pudo servírmela en la
máquina, porque hubo un tiempo que hicimos una perforación junto al pueblo.
Con el tiempo, y con este tipo de experiencias, aprendes que con pocos bienes materiales se puede vivir lleno de sueños y de ilusiones.
Lastima, que cuando hubo que cerrar aquella página en Mogente, (debido al traslado de perforadora), fuese un tanto complicada, por dos hechos que pudieron marcar todo nuestro futuro, y que paso a relatar.
El primer contratiempo que nos tocó pasar y especialmente a ella, fue la situación de incendio que se encontró dentro de la casa donde vivíamos, cuando a primeros de agosto regresaba del mercado,
y al abrirla puerta vio a la dueña que valiéndose de su garrota, trataba de mover hacia el patio una pequeña bombona de butano saliendo por la válvula una gran llamarada y en la cocina ardían algunas cosas, dando lugar a una intensa humareda negra, tal vez, la llegada de mi señora evitó, lo que pudo ser una tragedia, la señora, cuyo movimiento a causa de la lesión era muy torpe, estaba más preocupada de mover la botella con la garrota que de pedir ayuda, cosa que también habría sido lenta, debido a su limitado movimiento, la Loli alarmada le gritó que se saliese de la casa, que ella iría en busca de ayuda, afortunadamente esta se produjo en pocos minutos, porque en la calle próxima estaba ubicado un lugar de venta de butano, por tanto, los trabajadores con extintores corrieron hacia el lugar del incendio y consiguieron dominarlo con alguna dificultad.
Por nuestra parte y afortunadamente, Carlos decidió continuar en el vientre materno y sin problemas, a pesar del susto.
En el accidente sufrimos la perdida de una cesta tipo maleta, que nos regaló mi hermana María, donde entraban debidamente colocadas, una vajilla completa, que nos acompañó en nuestro primer desplazamiento, y algunas cosas de cocina más.
Ella nos contó una versión que no creímos, según nos dijo, fue a cambiar su botella, y al encender la luz se prendió, mi señora estaba haciendo un guiso en una botella similar y bastante próxima, al prenderse la suya, apago la nuestra, pero ya había prendido la cesta del regalo, las cortinas y según su versión, trató de empujar la suya ardiendo por la ventana con la garrota para que cayese al patio, pero se le giro y cayó en la casa, lo que imagino sería una antorcha en forma de lanzallamas, que con la garrota trataba de sacar hasta la calle, en ese momento fue, cuando llegó milagrosamente la Loli y pidió ayuda, (Nunca sabremos qué habría ocurrido de no aparecer en aquel momento mi señora , pero conociendo el carácter soberbio y orgulloso de aquella señora, quizá, cuando hubiese pedido ayuda habría sido demasiado tarde).
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